Cambiaban los sueños de mi destino,
intentaba recordar la última vez que el destino no me había soñado. En
vano…destino, soñar…no sabía donde empezaba la realidad y donde acababa el
surrealismo,
Yo, que me burlaba de ese maldito
hipócrita destino. Yo que esquivaba, e huía de la más mínima gota de futuro, y que
siempre habitaba en el presente. Yo que tenía las cosas planificadas hasta el
último soplo de pensamiento.
Dejo pasar el tiempo y sin querer
ni saberlo, se enciende esa chispa que poco a poco creí consumida. ¿Dónde te
escondías ardiente fuego? Creí apagada tu ardiente y fogosa llama, y sin avisar
ni llamar vuelves a resurgir de mi alma.
Ojos ardientes acechan, mientras me
siento acechado. Nerviosismo, rubor, excitación recorre mi cuerpo. Sueño el
destino…¿O es el destino que me sueña?
Es que el destino te a vuelto a encontar...te ha vuelto a recordar que tu corazon sabe palpitar y tus ojos saben sonreir y tus labios saben....
ResponderEliminarMaldito destino a veces ¿No crees India? Pero si, me ha vuelto a recordad.Saludos amiga.
EliminarEs el verdadero sentido de vivir. Que no se apague nunca esa llama!
ResponderEliminarUn abrazo grande, mi bello amigo
Pues si, tienes razón Patricia !Que no se apague nunca! Un gran abrazo.
EliminarUnamuniano te veo! :-) Bella prosa. ¡A saber Quién nos está soñando! :-) Un abrazo, amigo!
ResponderEliminarGracias por el elogio de unamuniano, ejjeje. A poco que nos despistamos todos soñamos. Un abrazo Ana.
ResponderEliminarBonito reencontrarse con esa llama!! Nunca sospechamos lo que nos tiene el magico destino aguardando!! Me gusta esta historia!! abrazote amigo!
ResponderEliminarSi, es bonito encontrarse con la llama, ese destino fugaz...dueño de nuestras vidas. Abrazote Maais.
EliminaraaaEl destino quiso que hoy se te vuelva a encender esa llama en tu alma..........sigue soñando
ResponderEliminarUn beso ana
Si Ana, ese destino que nunca sabemos donde nos lleva...Un beso.
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